Dad gracias al Señor porque es bueno, porque es eterna su misericordia, repite frecuentemente el orante israelita, y rezamos también en nuestra Liturgia. Sí, Dios Padre es tan bueno y rico en misericordia que nos ha enviado a su Hijo, hecho uno de nosotros, para que su vida humana fuera, no solo modelo de la nuestra, sino camino para llegar a la intimidad de Dios: Cuando vaya y os prepare un lugar, volveré y os llevaré conmigo, para que donde estoy yo estéis también vosotros (Jn 14,3). Pero antes de poder estar nosotros con Él en el cielo, ha querido Jesús estar con nosotros en la tierra, compartiendo momentos gozosos y dolorosos. (...)

Una historia de amor que comenzó en su Nacimiento, que un año más nos preparamos a celebrar con inmenso agradecimiento. Contemplaremos a ese Niño que nos manifestó de manera muy concreta el apasionado Amor de Dios por los hombres, que ha suscitado, a su vez, una respuesta de amor y confianza en infinidad de cristianos. (...)

, pidamos al Señor que este tiempo de Adviento aumente nuestra confianza en su amor, y nos haga a la vez “canales de misericordia para los hermanos”. Para ello, contamos, un año más, con la programación de Radio María, que nos ayudará a vivir con profundidad y alegría este bello tiempo litúrgico.

¡Santo y feliz tiempo de Adviento, en la espera del Señor con la Virgen María y San José!

Con mi bendición,